La
noche bilbaína del 12 de abril se adentró en el Kafe Antzokia para disfrutar de
una nueva edición del Festival Ecolunar. El telón de la sala se abrió dando
paso a las actuaciones de tres grandes grupos del panorama musical nacional
CYAN, SEXY ZEBRAS y DINERO. Ese fue el orden de actuación que los seguidores
eligieron mediante una encuesta realizada semanas antes por redes sociales, y
ese fue el orden en el que la música y la intensidad iba creciendo según
pasaban las horas.
Los
Turistas heridos de CYAN pisaron el
escenario, seguidos de Philippe Petite,
Síndrome de París, Aquitania y Mecanismos nocivos. Fue a mitad de la actuación cuando
interpretaron su ya conocida versión de La
leyenda del tiempo, tema que han ‘cyanizado’ haciendo que los versos de
Federico García Lorca abandonen el flamenco de Camarón y adopten los tintes del
rock alternativo de este grupo catalán.Después de sonar Un colectivo de raro propósito y Ballet mental, se presenta la colaboración de la noche. Sean
Marlhom, vocalista de Dinero, supo defender Belva
y colocarse a la altura de la circunstancia, acompañando la voz de Javi y creando
un dúo que seguramente se deje escuchar en los festivales que quedan por venir.
Te deslizas y Solo es una herida fueron el punto final del primer asalto del
Ecolunar. Gracias a Cyan la noche ya había merecido la pena y aún quedaba
música por escuchar.
Los
siguientes en saltar al terreno de juego fueron SEXY ZEBRAS, y con ellos llegaron
sus fans enloquecidos que parecían no saciarse con ninguno de sus acordes. El
trío madrileño abrió su bolo con Corofobia,
encabezando temas de ‘Volvamos a la selva’ como Intocables, Libres, Vagabundos, 3012 y Hasta el amanecer.
Sonó Fuego, única canción de su
primer trabajo ‘Nada más lejos de la realidad’ interpretada esa noche y la
pista se llenó de saltos desordenados. Los más incondicionales disfrutaron del que
fue primer single de la banda y terminaron subidos a las escaleras del
escenario colocándose casi a la altura de sus ídolos. Los platos fuertes los
dejaron para el final, Caníbales, Visitantes y Tnt detonaron la sala mientras los ‘Sexy’ se dejaban la piel en el
escenario y exprimían el máximo potencial de sus instrumentos. El concierto se hizo
corto y faltaron éxitos, pero el tiempo se acababa y aún quedaba otro plato
fuerte.
Aparecieron antes los acordes de Purasangre que ellos, y es que de Dinero ha evolucionado hasta la puesta en escena. Desde el backstage la guitarra de Sean anunciaba que empezaba la traca final de la noche. Después de este enérgico comienzo un espontáneo se animó a subir al escenario y nos deleitó con un baile innovador-rompedor-transgresor al son de Dinamita. Sonaron El momento perfecto, Como cuando quien, Sobran las palabras y Nada, antes de interpretar su ‘balada’ Efecto granada. Tras Difícil y Lo mismo, llegó el momento más íntimo de la noche con Autoafirmación, pero no se relajó el ambiente ya que a continuación Vaya panorama y Trastorno bipolar lo volvieron a caldear. Fue con Saboreal cuando el vocalista, guitarra en mano, abandonó el escenario y cantó a capela entre sus fans. Ya se intuía el final, pero Ekain, Rubi y Sean nos regalaron Mentiras, Duelo de titanes, Tiene que parar, En invierno y como colofón su tema más potente Parásito.
El Antzokia bajó el telón. Las horas del Ecolunar se habían consumido entre música, saltos, luces, calor, bebidas, amigos… Y rock, mucho rock en todas sus versiones. Producto nacional con grupos de pata negra que gracias a festivales como éste podemos disfrutar y bailar hasta que el sudor empapa las almas rockeras. Sin duda, fue una grandísima noche.
Mélani Morán (@mel_mc888).
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