Un jueves más, la música hizo vibrar las calles de León gracias a los conciertos de El Gran Café. Esta vez se trataba de un grupo que despide sus 11 años de carrera con una corta lista de conciertos de los cuales uno se dejó caer en esta ciudad. La Sonrisa De Julia nos dio su último ‘adiós’.
Cuando Marcos, Raúl y Mario quisieron subir al escenario se encontraron una sala casi repleta en la que tuvieron que abrirse paso entre la gente para poder empezar el concierto. Con las primeras notas, la voz dulce del vocalista encandiló a los presentes embarcándolos conscientemente en "El viaje del sonámbulo". Tras "El error más bello", "Nadie lo sabe" y "Déjà vu" llegaron "El hombre que olvidó su nombre" y "Tormentas" acompañados de la fiesta que se merece una despedida como la que estábamos viviendo. La complicidad de los tres componentes de la banda transmitía una confianza que nos dejaba formar parte de ellos en cada acorde.
La velada no había hecho más que empezar y entre copas de vino pudimos disfrutar de "Bipolar", "Hay alguien más ahí", "Libres" y la canción que mas describe su momento "Luces de Neón". Después de tanta melancolía "Muévelo" activó de nuevo la noche llenándola de saltos, danzas y movimientos. A medio tema y pasando la guitarra a su compañero de manera magistral sin que dejase de sonar, Marcos nos deleitó con su peculiar baile que contagia optimismo y energía a quien consigue seguirlo.
Las presentaciones se hicieron en "Extraño" y más que una interpretación de la canción, pudimos escuchar todo una improvisación de cada uno de los miembros en la que sonaron tintes de blues finalizando con acordes de reggea al son de ‘Oye como va, mi ritmo…’. Tras este derroche de arte, "Euforia" despide a Mario y a Raúl quedando Marcos, su guitarra y su voz solos ante el peligro. Sin ningún tipo de micro ni amplificador, interpreta "Grito", la sala se paraliza y yo me quedo sin palabras para describir ese momento y el que vendrá a continuación. Sigue solo en el escenario explicando ahora el porqué de que "Naufrago" sea su canción favorita.
Posteriormente suena "Llevo tu voz". En ese momento Raúl se une con la percusión y desvían la canción que les dio a conocer hasta llegar al "Hallelujha" de Leonard Cohen. Sin salirnos de la atmósfera creada llega el turno de "El instante", un tema que nos dice que debemos disfrutar del presente, de cada uno de los momentos que vivimos por pequeños que sean, apreciarlos y valorarlos, sin pensar en nada más.
El concierto se acaba y lo hace de la mejor manera posible. Con Mario de nuevo sobre el escenario, los tres grandes músicos hacen que "Loco" y "Puedo" sean la mejor de las despedidas de un grupo que tras una larga carrera decide decir adiós como conjunto y dar paso a sus nuevos proyectos individuales.
Nos dejan con una sensación placenteramente amarga, la sensación de un Fin dando paso a un Comienzo que esperamos venga pronto a visitarnos. Que la suerte y la música os acompañen en vuestros nuevos caminos y que esos caminos se crucen en León.
Mélani Morán (@mel_mc888).
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